El parque de vehículos eléctricos en España ha crecido exponencialmente en los últimos años, superando ya las 300.000 unidades circulando por nuestras carreteras. Este aumento, impulsado por las ayudas del Plan MOVES y la concienciación ambiental, ha obligado a las autoridades a adaptar las inspecciones técnicas a las particularidades de estos vehículos.

Los coches eléctricos no tienen motor de combustión, ni sistema de escape, ni emiten gases contaminantes. Pero tienen componentes críticos que requieren inspecciones específicas: baterías de alta tensión, sistemas de carga, motores eléctricos, y electrónica compleja. Por eso, la ITV para vehículos eléctricos está cambiando radicalmente en 2025 y continuará evolucionando en 2026.

¿Por qué están cambiando las ITV para coches eléctricos?

Hay tres razones fundamentales que justifican esta transformación en las inspecciones técnicas de vehículos eléctricos:

1. Aumento exponencial del parque de vehículos eléctricos: Según la DGT, en 2024 circulaban en España más de 300.000 coches eléctricos puros y casi 200.000 híbridos enchufables. Muchos de los primeros modelos (Nissan Leaf, Renault ZOE, BMW i3 de 2013-2016) ya están empezando a cumplir los plazos para pasar su primera ITV, y las estaciones no estaban preparadas para inspeccionarlos correctamente.

2. Tecnología radicalmente diferente a los vehículos térmicos: Los coches eléctricos tienen sistemas de alta tensión (400-800V) que requieren protocolos de seguridad específicos, baterías cuyo estado de salud afecta directamente a la seguridad y prestaciones, y sistemas electrónicos avanzados (ADAS) que necesitan verificación especializada. Las pruebas tradicionales de ITV (emisiones, humos, catalizador) no aplican, pero faltan otras.

3. Normativas europeas armonizadas: La Unión Europea está trabajando en armonizar las inspecciones técnicas de vehículos eléctricos en todos los países miembros. El Reglamento (UE) 2024/1257 sobre seguridad de vehículos establece nuevos requisitos que España debe transponer progresivamente entre 2025 y 2027, incluyendo verificación obligatoria de sistemas de batería y ADAS.

Cambios implementados en 2025

Desde enero de 2025, las estaciones ITV de toda España están aplicando nuevas comprobaciones específicas para vehículos eléctricos e híbridos enchufables. Estas son las principales novedades:

Revisión avanzada de la batería de tracción

La batería es el componente más crítico y costoso de un coche eléctrico. Su estado de salud afecta directamente a la seguridad, autonomía y valor del vehículo. Por eso, desde 2025 es obligatorio comprobar el State of Health (SoH) de la batería. Si quieres saber más sobre cómo cuidar y mantener la salud de tu batería, te recomendamos leer nuestra guía completa sobre degradación de baterías.

¿Qué es el SoH? El State of Health (Estado de Salud) indica el porcentaje de capacidad útil que conserva la batería respecto a su capacidad original de fábrica. Una batería nueva tiene un SoH del 100%. Con el uso y el tiempo, este porcentaje va disminuyendo debido a la degradación química natural. Este proceso puede verse acelerado por factores como las prácticas de carga inadecuadas o la exposición a temperaturas extremas.

Cómo se mide en la ITV: Los inspectores conectan un equipo de diagnosis OBD (On-Board Diagnostics) específico para vehículos eléctricos que lee los datos del BMS (Battery Management System) del coche. Este sistema indica el SoH calculado por el fabricante.

Umbrales aceptables: Aunque no existe todavía un estándar oficial único en toda España, la mayoría de estaciones están aplicando estos criterios:

• SoH superior al 80%: Estado favorable, sin defectos
• SoH entre 70-80%: Estado aceptable, posible anotación informativa
• SoH entre 60-70%: Defecto leve, recomendación de revisión en taller oficial
• SoH inferior al 60%: Defecto grave, puede impedir pasar la ITV por pérdida significativa de prestaciones y seguridad

Nuevas comprobaciones del sistema de carga

El sistema de carga es otro elemento específico de los vehículos eléctricos que requiere inspección particular. Desde 2025, las estaciones ITV comprueban:

Estado del puerto de carga: Inspección visual del conector (tipo 2, CCS Combo, CHAdeMO según el modelo) para detectar desgaste, oxidación, pines dañados o deformaciones. Un conector en mal estado puede provocar fallos de carga, sobrecalentamientos o incluso cortocircuitos peligrosos.

Verificación de seguridad de los cables: Comprobación del cable de carga (si está integrado en el vehículo, como en algunos PHEV) para detectar cortes, abrasiones en el aislamiento o daños en los conectores. Esto es especialmente relevante en vehículos que se cargan habitualmente en exterior o con condiciones climatológicas adversas.

Comprobación de aislamiento eléctrico: Mediante equipos específicos, se verifica que el sistema de carga mantiene el aislamiento eléctrico correcto y no hay fugas de corriente que puedan suponer riesgo de electrocución.

Actualización del examen del sistema eléctrico de alta tensión

Los coches eléctricos funcionan con sistemas de alta tensión (entre 400V y 800V según el modelo), mucho más peligrosos que los 12V de un coche convencional. Las nuevas comprobaciones incluyen:

Revisión de conectores naranjas: Todos los cables y conectores de alta tensión están identificados con color naranja según normativa. Los inspectores verifican visualmente que no haya conectores sueltos, mal fijados, con signos de sobrecalentamiento (manchas de quemado) o con el aislamiento deteriorado.

Integridad del aislamiento de alta tensión: Comprobación mediante equipos de medida que el sistema mantiene la resistencia de aislamiento adecuada (normalmente debe superar 500 Ω/V). Un aislamiento deficiente puede provocar fugas eléctricas peligrosas.

Sistema de desconexión de emergencia: Verificación del correcto funcionamiento del sistema de desconexión automática de alta tensión en caso de accidente. Este sistema debe cortar inmediatamente el flujo eléctrico si detecta un impacto para proteger a ocupantes y servicios de emergencia.

Revisión de software y diagnósticos obligatorios

Los vehículos eléctricos modernos son prácticamente ordenadores sobre ruedas. Desde 2025, la ITV incluye:

Lectura OBD específica para vehículos eléctricos: Conexión al puerto de diagnosis para leer códigos de error específicos de sistemas eléctricos: BMS (gestión de batería), gestión térmica, motor eléctrico, inversores, sistemas de recuperación de energía, etc.

Verificación de actualizaciones críticas de seguridad: Comprobación de que el vehículo tiene instaladas las actualizaciones de software críticas que el fabricante haya emitido por temas de seguridad. Esto es especialmente relevante tras algunos casos de recalls masivos por problemas de software (como los de Hyundai Kona EV o Chevrolet Bolt).

Cambios previstos para 2026

Los cambios implementados en 2025 son solo el principio. Para 2026 están previstas nuevas comprobaciones aún más exigentes que convertirán la ITV de vehículos eléctricos en un proceso más complejo:

Registro digital del estado de la batería (pasaporte de batería)

Uno de los cambios más importantes previstos para 2026 es la implementación del "pasaporte digital de batería", un sistema de trazabilidad obligatorio en la UE desde febrero de 2027 según el Reglamento (UE) 2023/1542.

¿Qué información incluirá el pasaporte de batería?

• Identificación única de la batería (número de serie, fabricante, fecha de producción)
• Composición química y materiales utilizados
• Capacidad original y capacidad actual en kWh
• Historial de SoH (Estado de Salud) en cada ITV
• Número de ciclos de carga completados
• Información sobre reciclabilidad y contenido reciclado
• Historial de reparaciones o sustituciones de módulos

Impacto en la ITV: A partir de 2026, las estaciones ITV deberán registrar obligatoriamente el estado de la batería en este pasaporte digital. Esto permitirá un seguimiento completo de la degradación y facilitará la compraventa de vehículos de segunda mano, ya que los compradores podrán conocer el historial real de la batería.

Medición estandarizada de autonomía real

Otra novedad prevista para 2026 es la medición de la autonomía real del vehículo durante la ITV, para verificar que no se ha degradado de forma excesiva.

¿Cómo se medirá? Mediante un protocolo estandarizado que combinará la lectura del SoH de la batería con el consumo medio registrado por el ordenador de a bordo. No será una prueba en carretera, sino un cálculo basado en datos técnicos verificables.

Diferencias con el ciclo WLTP: El WLTP (Worldwide Harmonized Light Vehicles Test Procedure) es el ciclo de homologación usado por los fabricantes para certificar la autonomía oficial. La medición en ITV no replicará este test (demasiado complejo y largo), sino que verificará que la autonomía real no ha caído por debajo de umbrales mínimos de seguridad.

Umbrales mínimos previstos: Aunque todavía no están oficialmente publicados, se está barajando que el vehículo deba mantener al menos el 70% de su autonomía WLTP original para considerarse en estado aceptable. Por debajo del 60%, podría ser defecto grave.

Ejemplo práctico: Un Nissan Leaf de 40 kWh de 2018 tenía autonomía WLTP de 270 km. Si en la ITV de 2026 se determina que su autonomía real está por debajo de 189 km (70% de 270), podría recibir una anotación o defecto leve. Si está por debajo de 162 km (60%), podría ser defecto grave.

Verificación del funcionamiento de sistemas ADAS obligatorios

El Reglamento General de Seguridad de la UE establece que desde julio de 2024 todos los vehículos nuevos deben incorporar determinados sistemas ADAS (Advanced Driver Assistance Systems). A partir de 2026, la ITV verificará que estos sistemas funcionan correctamente:

Sistemas ADAS que se comprobarán:

• Frenado automático de emergencia (AEB): Verifica que el sistema detecta obstáculos y puede activar la frenada autónoma
• Detección de peatones y ciclistas: Comprobación del correcto funcionamiento de cámaras y sensores
• Sistema de mantenimiento de carril (LKA): Verificación de que detecta las líneas de carril y avisa o corrige
• Alerta de cambio de carril (LDW): Comprobación de avisos al conductor
• Asistente de velocidad inteligente (ISA): Verificación de la lectura de señales y limitación de velocidad
• Sistema de detección de fatiga y distracción: Comprobación de funcionamiento de alertas

Estos sistemas son especialmente relevantes en coches eléctricos porque muchos modelos los incorporan de serie desde hace años (Tesla, Polestar, BMW iX, Hyundai Ioniq, etc.).

Revisiones del sistema de refrigeración de batería

Las baterías de alta capacidad necesitan refrigeración activa para mantener su temperatura óptima (generalmente entre 20-40°C). Desde 2026 se inspeccionará:

Inspección del circuito líquido de refrigeración: Muchos coches eléctricos (Tesla, Audi e-tron, Porsche Taycan, etc.) utilizan refrigeración líquida para la batería. Se comprobará que no haya fugas, mangueras deterioradas o fallos en la bomba de circulación.

Revisión del estado del refrigerante: Verificación del nivel y estado del líquido refrigerante específico para baterías (diferente del refrigerante del motor térmico). Un refrigerante degradado puede provocar sobrecalentamiento de la batería y acelerar su degradación o incluso riesgo de incendio.

Cómo afectarán estos cambios al coste y duración de la ITV

Las nuevas comprobaciones específicas para vehículos eléctricos tendrán impacto en el precio y tiempo de la inspección:

Aumento del precio: Actualmente (2025), la mayoría de estaciones cobran lo mismo por la ITV de un coche eléctrico que por uno de gasolina (entre 40-60€ según comunidad autónoma y tipo de vehículo). Sin embargo, se espera que en 2026 se establezcan tarifas diferenciadas para vehículos eléctricos que reflejen el coste de los equipos específicos de diagnosis y la formación especializada del personal.

El incremento estimado está entre 10-20€ adicionales respecto a la ITV de un vehículo convencional, situando el precio en torno a 55-80€ según la comunidad autónoma.

Incremento del tiempo de inspección: La ITV tradicional de un turismo dura aproximadamente 30-45 minutos. Con las nuevas comprobaciones específicas para vehículos eléctricos, el tiempo estimado aumenta a 45-60 minutos, especialmente cuando se incluyen las verificaciones de ADAS y el registro en el pasaporte digital de batería.

Posibles tarifas reducidas por compensación: Como los vehículos eléctricos no requieren prueba de emisiones, gases de escape ni comprobación de catalizador (que sí se hacen en térmicos), algunas comunidades están estudiando que el incremento de precio por las nuevas pruebas se compense parcialmente con la eliminación de estas otras comprobaciones.

Consejos para preparar tu coche eléctrico para pasar la ITV

Para aumentar las probabilidades de pasar la ITV a la primera y evitar sorpresas desagradables, sigue estos consejos antes de acudir a la estación:

1. Revisa el estado de salud de la batería con antelación: Muchos coches eléctricos modernos muestran el SoH de la batería en el sistema de infoentretenimiento o a través de la app del fabricante (Tesla, Polestar, BMW, etc.). Compruébalo antes de ir. Si no tienes acceso a este dato, acude a un taller especializado o al oficial de tu marca para una diagnosis previa.

2. Comprobaciones básicas del sistema de carga:

• Inspecciona visualmente el puerto de carga: límpialo si tiene suciedad, busca oxidación o pines doblados
• Verifica que la tapa del puerto cierra correctamente y el sello está íntegro (evita entrada de agua)
• Si tu coche tiene cable de carga integrado, revisa que no tenga cortes o desgaste en el aislamiento
• Prueba que el coche carga correctamente en casa antes de acudir (sin errores ni avisos)

3. Presión de neumáticos (especialmente importante en vehículos eléctricos): Los coches eléctricos son más pesados que sus equivalentes de combustión debido a la batería. Circular con presión incorrecta afecta más al consumo y al desgaste. Para optimizar la eficiencia, te recomendamos revisar nuestro artículo sobre cómo ahorrar en electricidad al cargar tu coche eléctrico. Además, en la ITV es causa frecuente de defecto leve. Revisa la presión recomendada (suele estar en el marco de la puerta del conductor) y ajústala correctamente antes de acudir.

4. Actualiza el software antes de la inspección: Si tu coche permite actualizaciones OTA (Over-The-Air, como Tesla, Polestar, Mercedes EQ, etc.), asegúrate de tener instalada la última versión del software antes de la ITV. Las estaciones verificarán que tienes las actualizaciones críticas de seguridad instaladas. Si estás considerando instalar un cargador en casa para mantener tu vehículo siempre actualizado, nuestra comparativa entre wallbox monofásico vs. trifásico te ayudará a elegir la mejor opción. Si tu coche no tiene OTA, consulta con el taller oficial si hay actualizaciones pendientes.

5. Revisa el cableado visible de alta tensión: Aunque no vas a tocar nada del sistema de alta tensión (¡nunca lo hagas sin formación específica!), puedes hacer una inspección visual básica: busca cables naranjas visibles bajo el vehículo (protecciones del pack de batería) y verifica que no haya daños por impactos en bajos, oxidación excesiva o cables colgando.

6. Comprueba el funcionamiento de los sistemas ADAS: Antes de la ITV, verifica que los sistemas de asistencia funcionan correctamente. Haz pruebas básicas:

• Asegúrate de que no haya avisos de "cámara frontal bloqueada" (limpia parabrisas)
• Verifica que el sistema de mantenimiento de carril funciona en autopista
• Comprueba que el control de crucero adaptativo detecta vehículos delante
• Confirma que no haya errores o avisos en el cuadro de instrumentos relacionados con ADAS

7. Elige una estación ITV preparada para vehículos eléctricos: No todas las estaciones tienen el mismo nivel de equipamiento ni personal formado. Llama antes para confirmar que disponen de equipos específicos para diagnosis de vehículos eléctricos, especialmente si tu modelo es poco común o de importación. Las estaciones más grandes de redes como APPLUS+, DEKRA, o las públicas autonómicas suelen estar mejor preparadas.

Preguntas frecuentes sobre la ITV de coches eléctricos

Conclusión: adaptarse a la nueva ITV eléctrica

Los cambios en la ITV para coches eléctricos en 2025 y 2026 representan una evolución necesaria para garantizar la seguridad y fiabilidad de estos vehículos a medida que el parque envejece y aumenta en número. Aunque inicialmente puedan parecer más estrictos, estas nuevas comprobaciones benefician tanto a propietarios como a compradores de segunda mano.

La verificación del estado de la batería, los sistemas de carga y los ADAS aportará transparencia al mercado de vehículos eléctricos usados, facilitará la detección temprana de problemas potenciales, y contribuirá a mantener altos estándares de seguridad. El pasaporte digital de batería será especialmente valioso para conocer el historial real de degradación y tomar decisiones informadas en la compraventa. Si estás pensando en adquirir un vehículo eléctrico de segunda mano, te recomendamos consultar nuestra guía sobre el coste total de propiedad a 5 años para tomar la mejor decisión de compra.

Como propietario de un vehículo eléctrico, la mejor estrategia es adelantarse a estos cambios: mantén actualizado el software de tu coche, realiza revisiones periódicas del estado de la batería, y sigue las recomendaciones de mantenimiento del fabricante. Así, pasar la ITV será un trámite sencillo y sin sorpresas.

La movilidad eléctrica sigue evolucionando, y las inspecciones técnicas evolucionan con ella. Estar informado y preparado es la clave para disfrutar de tu coche eléctrico con total tranquilidad durante muchos años.

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